Sector Turístico
Durante la temporada alta, que va de diciembre a marzo, la actividad turística ocupa un alto porcentaje de fuerza laboral en todos los rubros del sector y en todos sus niveles, desde los más operativos hasta los más calificados.
La hotelería, la gastronomía, los balnearios, las inmobiliarias y los comercios funcionan todo el día y todos los días para atender una demanda de público que alcanza los 3 millones de turistas a lo largo de todo el verano.
Construcción
En todas las localidades del partido existen zonas privadas en reserva, que son loteadas a medida que la ciudad lo requiere.
Tener una casa propia, planificarla y construirla es característico del vivir en Pinamar, de allí que las profesiones y los oficios afines a esta actividad tengan un rol preponderante y de altísima demanda.
Oficios y profesiones como los ingenieros, arquitectos, paisajistas, contratistas, electricistas, carpinteros, gasistas y comerciantes de artículos para la construcción encuentran altas oportunidades.
Profesionales
De la mano del turismo se desprende un sinnúmero de servicios que indirectamente asisten a los empresarios turísticos, los comerciantes, visitantes y a la población en general.
Profesionales de la salud, de la educación, de la abogacía, de áreas contables, del cuidado de las mascotas y de la estética son requeridos asiduamente y llegan a conformar importantes carteras de clientes.
Comercios
La actividad comercial también deriva del turismo y conforma un perfecto entramado que acerca de manera eficiente los insumos exigidos por el funcionamiento diario de la ciudad.
Comercios alimenticios, supermercados, mercerías, mueblerías y servicios como asistencia mecánica automotriz, lavanderías y demás actividades necesarias gozan de un movimiento que va más allá de la temporada y que continúa en crecimiento.